Esta semana nuestra amiga MONICA, desde su blog NEOGEMINIS nos hace la siguiente propuesta juevera un tanto improvisada: escribir lo que surja.
Así que con tema libre en esta ocasión y como siempre con libertad de estilo, si es posible preparar un relato con un límite de 350 palabras.
AQUÍ podréis encontrar el resto de relatos participantes.
"SE EQUIVOCÓ EL DESTINO"
Imagen: Rosa Pita Nebot
Cuando nos estaban fabricando, junto con mis hermanas de mesa, se suponía que éramos un lujo en comparación a los muebles para la gente corriente, o sea, para la gente sencilla.
Nosotras no, éramos como las joyas del mobiliario, sólo unos pocos privilegiados lucirían tan fino y exquisito material, al fin y al cabo culos ricos, aunque los culos pobres poseen muchas cosas en común, por suerte. Pero según el destino de cada una luciríamos más. En nuestro caso íbamos destinadas a la alta burguesía. La lástima es que sólo estábamos para pocas ocasiones, pero hacíamos bonito. Para nosotras un orgullo.
Pero, como todo, el tiempo pasa y hoy, día de recogida de muebles, aquí estoy sola, al lado de un árbol, esperando que alguien se de cuenta de que, aúnque estoy algo estropeada, sigo siendo de calidad. Con un poco de buena tapicería aún luciría más que bien.
Mis hermanas ya fueron pasto de la hoguera de San Juan y yo, al lado de otros trastos viejos, sigo orgullosa de mi estirpe. Aunque también me doy cuenta de que hemos sido sólo adornos, mientras que las de la gente sencilla han compartido pisotones, estirones, risas, manchurrones... están llenas de vida, de recuerdos, aunque acaben en la basura.
Yo, en mi otra vida no quiero ser silla de lujo.
María de la O
En el blog EL VICI SOLITARI estamos de ANIVERSARIO,
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Lo que surgió de ver esa silla tan buena, abandonada a su suerte, es un encanto de texto.
ResponEliminaYo también quiero ser una silla vulgar :-) Un abrazo fuerte, amigas
Es que nuestra amiga Maria de la O es una gran observadora y como ella suele decir la calle es su fuente de mayor inspiración. Un abrazote Paz!
EliminaMuy bueno, nunca se me hubiera ocurrido ver el mundo desde una forma de silla, te ha quedado un texto muy bueno y sin dudas muy cierto, todo al cabo del tiempo termina en un basurero.
ResponEliminaSaludos.
PATRICIA F.
Gracias Patricia! Sin duda el tiempo nos iguala a todos, ricos o pobres, lo importante es la calidad de lo vivido! Un abrazo!
Elimina¿De qué sirve un mueble si no se usa como tal? Tu relato me pareció muy bonito y reflexivo, María. Y la imagen también tiene algo especial.
ResponEliminaUn besazo
Qué pena la de objetos que aún pudiéndose restaurar son de gran utilidad. La evolución del consumo en estos tiempos da mucha pena. Me encantó el texto. Un abrazo
ResponEliminaOriginal muy bien llevado tu relato en la memoria de esa vieja silla. Muy buen aporte juevero. Muchas gracias María
ResponEliminaUn relato entretenido y diferente. Desde luego, a las sillas de lujo y a las que son corrientes les pasa como a las personas ya sean ricas o poberes: todos acabamos nuestros días en el mismo sitio.
ResponEliminaEnhorabuena por tu relato.
Parecía que tenía una posición privelegiada, la mejor para una silla. Pero seres más humildes tuvieron una mejor existencia, tenido mejores recuerdos.
ResponEliminaUn abrazo.
El triste final de quien lo tuvo todo. Y aun suerte que no acabó en la hoguera.
ResponEliminaBesos, M. Cristina
Esto de la recogida de muebles semanal está siendo una putada para los "utensilios antiguos". Eso de "trastos viejos" es otra putada de expresión que facilita su muerte.
ResponEliminaLa eutanasia para el que la desee.
Besoss, Marieta
Que manera de expresar sentimientos a unas piezas inerte. Que en su día fueron naturaleza viva. Envidio tus historias cortas que siempre tienen un remate asombroso. Fina
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