Para el reto juevero de esta semana nuestra compañera MYRIAM desde su Blog DE AMORES Y RELACIONES nos propone como tema de nuestros relatos “el viejo molino”, ilustrándolo con la imagen del mismo nombre de Ildefonso Robledo de su blog "Portafolio de Fotografías" .
AQUÍ podréis encontrar el resto de relatos participantes.
Ildefonso Robledo
"LA HIJA DEL MOLINERO"
En el viejo molino vivía un matrimonio con sus tres hijos. El molinero que durante generaciones sus antepasados le habían legado su profesión, pretendía que sus hijos siguieran su ejemplo.
Su mujer además de encargarse de los niños y la casa situada sobre el molino, tenía muy buena mano para preparar unos postres exquisitos con la harina que se producía en el molino. Eran muy apreciados en la zona, algunos negocios del pueblo y también particulares se los encargaban y le pagaban por ellos un buen dinero. Otra de sus habilidades era la pintura. En su poco tiempo libre realizaba retratos de toda la familia, pintaba bonitos bodegones y paisajes del pueblo. Todos decían que tenía talento para la pintura, pero nunca se atrevió a lanzarse a la aventura y plantearselo en serio.
A medida que sus hijos fueron creciendo, ninguno de los tres demostró el mínimo interés en el negocio familiar, para disgusto del molinero. El hijo mayor se fue a hacer fortuna al extranjero, el mediano consiguió una beca de estudios en la capital y la hija pequeña, le salió una oportunidad de trabajo para servir en la ciudad.
Ella estuvo varios años fuera de casa, y a menudo recibía carta de su madre explicándole los éxitos de sus hermanos. Pero en la última carta que le envió, le explicaba que habían sufrido un incendio en casa. Por suerte a ellos no les había pasado nada, pero el viejo molino quedo destrozado. Regresó al pueblo tan pronto como pudo y para su sorpresa comprobó que de todas las pinturas y retratos de su madre, que lucía con orgullo en su casa, el único que se había salvado de las llamas había sido el suyo.
Quiso entenderlo como una señal. Se quedaría con sus padres en el viejo molino y les ayudaría a reconstruirlo, buscarían a un mozo en el pueblo que ayudara a su padre en tan ardua tarea. Y ella junto a su madre, recuperaría las viejas recetas de repostería de la abuela y montaría un obrador en el molino ya restaurado y vendería sus postres por los pueblos de la zona. Con la mejor harina producida en el molino y su madre como maestra, estaba convencida de que nada podía salir mal.
Marifelita
Nada saldrá mal porque ella se quedará por amor a: sus padres, historia, pueblo y tantos recuerdos atesorados en su memoria. El viejo molino volverá a moler y producir harina.
ResponEliminaAbrazos
La tradición y la familia ya no estan de moda, pero ahí estan para los románticos que aún creen en ella! Ja, ja! Un abrazote! Marifelita.
EliminaCómo dice TATIANA, lo que se hace por amor no puede salir mal. Además creará una empresa de repostería con la mejor harina de la zona. Es triste para un padre que sus hijos varones no quieran seguir con el molino, pero es ley de vida que cada uno siga su camino. Ya se reunirán todos en familia para las fiestas.
ResponEliminaMuchas gracias, Marifelita, por haberte sumado a mi convocatoria. Beso grande.
Cuando hay dulces de por medio, nada puede salir mal! je, je! Gracias Myriam por esta inspiradora convocatoria. Un abrazote! Marifelita.
EliminaHola Marifelita, una historia con moraleja, el amor siempre es lo más importante, en este caso el amor familiar para vencer las dificultades y salir adelante, me gustó mucho.
ResponEliminaUn abrazo.
PATRICIA F.
Hola Patricia! Hacer piña siempre es muy importante para sentirnos apoyados, más fuertes y seguir adelante con lo que nos propongamos en la vida! Hay que tener la suerte de caer en una "buena familia"! Je, je! Un abrazote! Marifelita!
EliminaY nada puede salir mal cuando pones corazón y alma en tus proyectos. Un bello relato, besos.
ResponEliminaGracias Inma! Cuando se pone el corazón y el alma en algo es difícil que salga mal! Para nosotros siempre tiene que ser un éxito! Un besote! Marifelita.
EliminaCon cariño el mundo gira despacio , como el molino, y fluye la vida y se reúne la familia. Un abrazo
ResponEliminaTienes razón Ester! Con cariño todas las relaciones y las cosas que nos propongamos en la vida fluyen mejor! Un abrazote! Marifelita.
EliminaCuando se redefine los objetivos y se los busca alcanzar con convicción, todo es posible. Buena historia. Un abrazo
ResponEliminaSupongo que todos tenemos un momento en la vida en la que nos planteamos algunas cosas y darle la vuelta a otras! A veces nos falta un empujón para decidirnos! Un abrazote Neo! Marifelita.
Eliminapensé que la madre había quemado el molino. Para crear un objetivo familiar, algo que construir para volver a reunir fuerzas y a la familia. dejar morir un negocio, con marcó físico, y uno tan hermoso como este, es más duro de lo que parece. a las cosas también se les coge cariño. cuando los padres estén para morirse, volverán los hijos para... un clásico
ResponEliminabesosss amiga
Gabiliante
Si la madre provocó el incendio para atraer a los hijos de vuelta ... nunca lo sabremos... ja,ja! Si que es una pena que ciertas profesiones se pierdan, y que algunas casas familiares con historia queden abandonadas, con los sacrificios que comportan a quienes las subieron! Un besote amigo! Marifelita
EliminaHola Marifelita, una historia hermosa y con olor a pan y dulces. Seguro que les ira bien. Un abrazo.
ResponEliminaLa vida con pan y dulces, sin duda sabe mejor! Je, je! Un abrazote Ainhoa! Marifelita.
EliminaPlanteaste un conflicto, que suele darse, entre continuar una tradición familiar, muy apreciada, o seguir los propios sueños. Los dos hijos mayores tenían proyectos muy sólidos, que se encaminaron muy bien. Y la madre estaba orgullosa.
ResponEliminaY le toca a la hija menor, quien vio una señal en que se salvaran sus retratos, el darle nueva vida al molino. Se paso, demostrando una admirable capacidad de iniciativa. Postres con harina producida en el molino, como ingrediente, un gran plan.
Muy bien contado.
Seguir la tradición familiar tanto en una profesión, negocio o en cuidar de la casa donde se criaron generaciones, es todo un dilema para quien se lo plantea. Eso demuestra que para ella es muy importante y pretende conservarlo aunque quizá a otros no se les plantee el mismo problema! Con iniciativa y un poco de ayuda, todo es posible! Un abrazote! Marifelita.
EliminaCuando los lazos de amor son tan intenso como ese hilo invisible pero tan resistente, todo puede pasar, todo puede recuperarse, todo esta para comenzar una vez mas.
ResponEliminaLindo mensaje.
Un abrazo :)
Esos hilos invisibles como tu los llamas son los que nos mantienen alerta y sujetos a las personas y cosas que nos importan! Cuando uno desea algo con mucha intensidad y le pone esfuerzo en conseguirlo tiene que salir bien! Un abrazote, Cecy! Marifelita.
EliminaHay que escuchar las señales para tomar decisiones y lograr vivir en paz .
ResponEliminaBeso
Si, esas señales a veces son nuestra intuición que nos dice por donde tenemos que continuar nuestras andanzas! Je, je! Un abrazote!
EliminaHola Marifelita, muy bueno y tierno. Difícil situación la de la hija, pero las señales, efectivamente, están ahí y tomó una muy buena decisión.
ResponEliminaBuen aporte para el reto.
Un abrazo. :)
Hola Merche! A veces nos cuesta tomar decisiones y si hay algo que nos sugiere una señal para poder avanzar y continuar, bienvenida sea! Un abrazote! Marifelita.
EliminaLas señales, a veces, son demasiado directas. El fuego fue una forma de purificar, una forma de empezar de cero, siendo la fuerza del amor y la voluntad, piezas claves para ese resurgir. Volver a casa y emprender una nueva vida.
ResponEliminaEs un texto con sabor añejo y eso me ha gustado, Marifé.
Un besazo.
A veces tiene que pasar algo importante en nuestras vidas para hacernos parar, reflexionar y pensar como queremos vivir a partir de mañana! Y hay que aprovechar esas segundas oportunidades! Un besote Mag! Marifelita.
EliminaLos hijos mayores tenían otros sueños. Pero la hija, en la ciudad, solo se ganaba la vida. Cualquier cosa la habría tomado como una señal para volver y dedicarse a lo mismo que sus padres. Ese sería su sueño. Besos.
ResponEliminaNunca es tarde para decidir que queremos hacer con nuestra vida! Cualquier momento es bueno para ello! Un besote Cris! Marifelita.
EliminaEl fuego siempre actua como arma purificadora que aun destruyendo todo a su paso nos trae la posibillidad de empezar de cero! Un abrazo Julio David! Marifelita!
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